Nacida
en Salamanca, (1934), ésta reconocida artista tuvo clara, desde edad muy
temprana, cuál era su vocación: Ser pintora y más concretamente, ser una mujer
pintora y pintar como mujer.
Y
esto es importante, porque esta voluntad resiliente, queda indudablemente
reflejada en su obra, en donde la figura de la mujer toma un valor preeminente
y permanente y su estilo unas características muy personales y buscádamente
femeninas.